Concentración contra la reforma laboral y de las pensiones

“Los trabajadores no van a perder derechos”-, sentenció el Presidente del Gobierno. La Patronal y CCOO-UGT nos repiten la misma mentira, pues todos sacan tajada al firmarlas (traducido en dinero y más dinero de todos para sus bolsillos).

Pero lo cierto es que perderemos derechos, así pretenden: retrasarnos la edad de jubilación a los 67 años, aumentar los años de cotización para jubilarse y promover la privatización de la misma (son los planes de pensiones), abaratar el despido (casi gratuito a 33 o 20 días por año trabajado), contratos de trabajo más precarios, peores condiciones para los jóvenes o darle más facilidades a las ETT´s.

“En tiempo de crisis todos tenemos que arrimar el hombro”-, decía desde el púlpito Zapatero. Todos, menos los: altos ejecutivos, políticos, militares, policías, dirigentes sindicales, aristócratas y demás parásitos.

Un país en el cual: los salarios están muy por debajo de la media europea y también existen más modalidades de contratación temporal, lo que multiplica la precariedad y con ello los accidentes laborales. Donde el gasto social no llega al 40%, mientras se reparte gran parte del presupuesto nacional para enriquecer más a: los bancos, ejército, empresarios y a los políticos; donde se privatizan cada vez más sectores (sanidad, transportes, Correos, etc.).

Y todavía tienen la desfachatez de pretender que seamos los más perjudicados (los trabajadores) quienes carguemos con los males que sólo los ricos han creado. Nos quieren como esclavos y que estemos callados.

Desde la CNT decimos NO A ESTAS REFORMAS y a la vez damos algunas alternativas para mejorar la calidad de vida de los trabajadores:

·Reducción de la jornada laboral y de la edad de jubilación (esto supone repartir el empleo y disminuirían muchas enfermedades, estrés o dolencias).

·Supresión de las horas extras (que quitan muchos puestos de trabajo), y equidad en todos los salarios.

·No más dinero público a entidades privadas, Iglesia y ejército.

·Supresión de las pensiones vitalicias de los políticos y a los altos funcionarios.