Voy a explicar en primer lugar cómo fue el asesinato de mi hermano y su relación con el conflicto de Irak. Todo el mundo ha sentido de cerca la pérdida de algún familiar, sabe qué es el luto. Pero no os podéis imaginar qué clase de luto es ver cómo asesinan a tu hermano, retransmitiéndolo al instante, en directo, ver las imágenes de su cuerpo ensangrentado, verlo toda nuestra familia, mis sobrinos, mi madre. Para superar esto hemos tenido que entender por qué lo habían asesinado, esto nos ha ayudado a mitigar el dolor, a transformar el dolor en lucha, (yo no entendía a las Madres de la Plaza de Mayo argentinas, ahora sí). Mi madre me lo explicaba claro: que el dolor sirva para algo, esto es luchar. A mi hermano lo mataron, pero no dejaremos que se olvide fácilmente.
