El estado de saturación en que se encuentra el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de La Piñera en Algeciras (Cádiz) ha sido denunciado por varias asociaciones y sindicatos del lugar.
Tras el traslado el pasado miércoles de 64 subsaharianos procedentes de Motril (Granada) se encuentra a su capacidad máxima.
No es la primera vez que este centro se encuentra al límite de su capacidad. Ya a principios del mes de julio, se produjo una situación similar.
La situación fue especialmente dramática a la hora de asistir psicológicamente a las mujeres que durante la travesía desde las costas africanas a las españolas vieron morir a sus hijos. Varias asociaciones y sindicatos del lugar insistieron entonces en la necesidad de cerrar este centro ya que, aseguran, “no cuenta con las condiciones de salubridad” necesarias.
El estado de saturación en que se encuentra el CIE algecireño impidió que el jueves que una veintena de inmigrantes argelinos llegados hasta Algeciras en las últimas horas pudiese ingresar. Por lo que la Policía los trasladó al Centro de Internamiento de la Isla de Las Palomas, en Tarifa, donde permanecerán hasta su repatriación. Este centro también carece de las condiciones mínimas para acoger a los inmigrantes.
La proliferación de estos Centros de Internamiento en Andalucía, o también conocidos como cárceles administrativas, ya que, el tratamiento que reciben los internos es de carácter carcelario (presencia policial, cámaras de vigilancia, revisión de los efectos personales, reclusión en celdas, etc.), es un fenómeno ocultado por los medios de comunicación habituales.
Por otra parte, los procedimientos administrativos de expulsión están basados en el castigo preventivo, el debelitamiento, cuando no la imposibilitación material del ejercicio de derechos fundamentales. No resulta exagerado, como vienen señalando los sectores implicados, calificar estas cárceles administrativas de verdaderos agujeros negros en un Estado de Derecho.
Los Centros de Internamiento de Extranjeros que existen en Andalucía «no cumplen con las mínimas garantías ni condiciones que deberían tener en cuanto a número de plazas, instalaciones y personal». Así pronunció la asociación Andalucía Acoge,, sobre los dos centros oficiales existentes en Andalucía, uno en Almería y otro en Algeciras, así como sobre las pequeñas instalaciones que de manera temporal se usan con este fin.
En cualquier caso, el problema de fondo, no es otro que la existencia misma de los CIE porque perpetuan que las persona que han cometido una falta administrativa, como entrar en el país de manera irregular, sean tratadas como un delincuentes.
x G.A.S
La Haine