A mi familia, parientes y amigos:
Anoche ocurrió un cambio en Estados Unidos que, hace poco, muchos decían jamás iba a pasar.
Un afro-americano fue elegido para La Casa Blanca por abrumadora mayoría. Esa mayoría le da el mandato de cumplir con sus promesas e indica que el pueblo norteamericano ha puesto en este hombre, que va a llamar su presidente, su esperanza en un cambio en este país.
ESPERANZA. Recuerdo muy bien lo que en verdad significa tener esperanza; han habido momentos en los que tenía la esperanza que la justicia estaba allí nomás, a la vuelta de la esquina.
He sido engañado y defraudado muchas veces. Creía que iba a tener justicia, pero me la negaban por tecnicismos en las apelaciones legales. O como lo que pasó hace ocho años. Todos pusimos nuestra fe y esperanza en el matrimonio Bill y Hillary, pero fuimos traicionados en el último minuto.
Muchos de mis amigos, familiares y partidarios se sintieron destrozados. Por mi parte, empecé a sentir que el peso y la tensión de una vida injustamente encarcelada empezaran a acorralarme en un rincón de mi celda y, después, de mi mente. Fue entonces cuando recordé nuestro grito de guerra de tantos años: «En el Espíritu de Caballo Loco.» Recordé la razón por la que el gran Caballo Loco se mantuvo firme y siguió siendo guerrero hasta su último aliento. Esa fuerza nos mantiene en pie, porque sabemos que estamos en lo correcto.
Estábamos en lo correcto cuando resistimos en Oglala; y era correcto que estuviéramos preparados para defendernos. Lo que no fue correcto, es que un jurado jamás escuchó ése testimonio, y así el resto del juicio fue resultado de la invención y, después, de la manipulación del FBI.
Este Espíritu de Caballo Loco nos lleva a estar siempre en resistencia total, contra el mal que se comete contra nuestros pueblos, contra nuestras comunidades, nuestras familias; y en contra de nosotros mismos. Para algunos es indignación, pero ésa es sólo una mera emoción que no resuelve el problema. Es cuando hacemos la opción consciente de tratar de resolver los errores de esta sociedad, que somos movidos por el Espíritu de Caballo Loco; por el Espíritu de resistencia que nos lleva a ponernos en pie en defensa del oprimido.
Ese Espíritu no puede ser vencido, y yo me negué a someterme y a declararme derrotado cuando parecía que quizás ya no había esperanza. Fue por las muchas cartas de simpatía y aliento de mucha gente, que continué por otros ocho años más. Y ahora el pueblo parece sentir en el aire, percibe vientos de cambio; y la elección de Obama es una manifestación de ese cambio.
Sinceramente espero que así sea, porque ahora ya tengo 64 años y estoy a punto de llegar a los 33 años de estar confinado y luchando por justicia y por mi libertad. Obama podría ser la última oportunidad de obtener mi libertad. Si algo he aprendido de campañas anteriores que buscaron mi clemencia es que él no lo va a hacer sólo, por su propia iniciativa. Obama va a necesitar vuestro apoyo en forma de opinión pública sobre el caso. Y eso no va a pasar hasta que eduquemos a todos en el país. Hasta que hagamos saber las circunstancias de mi caso; y escribamos cartas. Crear Grupos de Apoyo de Base, (Base Support Groups, BSG), que se dediquen a crear opinión pública.
Mi caso es un ejemplo nacional de justicia negada. Eso puede sonar fácil. Pero no lo es. El FBI, desde que centró su atención en el Movimiento Indio Americano, AIM, en los años 70’s, es la fuerza de oposición que intenta desacreditar mi causa y la del pueblo Nativo. Cuando parecía que Bill Clinton finalmente iba a concederme clemencia, agentes del FBI hicieron demostraciones en la Casa Blanca y usaron sus recursos para crear dudas en la mente de Clinton.
Así que las metas, que serán un reto para los Grupos de Apoyo de Base, son difundir conocimiento y mantener centrado el interés público. También existe la otra esperanza de que, con una generación que nació después que fui erróneamente condenado, habrá una nueva fuente de energía y acción.
Algo que quisiera que consideremos un momento es, «La Ley de Los 30 Años,» en lo que se refiere a mi condena y libertad bajo palabra. Cuando fuí condenado, las pautas de esa ley decían:
«Cualquier prisionero … será liberado bajo palabra … al haber cumplido treinta años por cada término consecutivo o términos de más de cuarenta y cinco años, incluso toda cadena perpetua, lo que acontezca antes. Sin embargo, la Comisión no dará libertad a un prisionero si se determina que él ha violado, seria o frecuentemente, las reglas y regulaciones de la institución o que hay una probabilidad razonable, que él va a cometer un crimen Federal, Estatal o local.» 28 U.S.C. sección 28 U.S.C. §4206(d)
Yo he cumplido más de 30 años de esta sentencia y he sido considerado un prisionero modelo. Y por mi edad y por el trabajo humanitario que hago para ayudar a mi pueblo desde que fui encarcelado, no existen probabilidades de que cometa un crimen. Según esa ley, deben concederme la libertad bajo palabra. Pero por lo que hemos aprendido del pasado, no podemos estar seguros de nada; por eso, sus cartas a la Comisión de libertad bajo palabra y a sus líderes en el Congreso deben centrarse en esta ley. Si conseguimos que la Comisión respete la letra y el espíritu de esa ley, habremos dado un buen paso hacia mi libertad; pero para eso vamos a tener que mantener y aumentar la presión.
El Comité y yo hemos estado discutiendo ideas y proyectos para hacer de ésta, una campaña pro-activa. En este momento estamos reconstruyendo el viejo Grupo de Apoyo a Leonard Peltier, (Leonard Peltier Support Group, LPSG), para convertirlo en Grupo de Base de Apoyo a Leonard Peltier, (Leonard Peltier Base Support Group, LPBSG). Esto es necesario por la descomposición del viejo Comité de Defensa de Leonard Peltier. Tuve que pedir a mi hermana y a mi sobrina que me ayuden a reconstruir de la nada mi Comité de Defensa. No tenemos ni registros, ni documentos, ni “merchandising”. No hemos podido ponernos en contacto con el anterior coordinador del LPDC. Sin embargo, tenemos la esperanza de resolver este problema; entre tanto, necesitamos seguir adelante con la campaña.
Todavía necesitamos que nuestros antiguos contactos y partidarios vuelvan a comunicarse con nosotros y que pongan al día sus direcciones postales para que mi Comité pueda manejar bien la correspondencia y las contribuciones. Esperamos que todos los que me han ayudado en el pasado se pongan en contacto con el nuevo, Comité de Defensa/Ofensa de Leonard Peltier, (Leonard Peltier Defense/Offense Committe, LPDOC), y que firmen nuestras listas para que puedan recibir las últimas noticias con información sobre el progreso o actividades que se necesitan en mi campaña.
Voy a necesitar que todos trabajen con mi Comité, asegurándose que toda actividad sea aprobada por la persona que es responsable en el Comité. Es importante que todos trabajemos cohesionadamente, en vez de dispersar nuestros esfuerzos y recursos. No queremos desanimar ideas y creatividad, sino que quisiéramos incorporar esas ideas en un esfuerzo amplio y unificado; y no actuar prematuramente en planes que quizás no conocemos debido al tiempo o a los detalles en los que se está trabajando.
Algunos de los proyectos que hemos estado discutiendo son: realizar cabalgatas, caminatas, carreras y otros eventos por todo el país para crear conciencia sobre mi caso. Estamos empezando a pedir a grupos musicales y artistas que hagan conciertos en su región para recaudar fondos. Hemos hablado de estrategias que podríamos seguir para fortalecer mi causa, pero todo dependerá de lo pronto que se formen los BSG y se empiecen a organizar en sus áreas.
Comprendo también que algunos de nosotros tenemos problemas personales con otros. Tengo la esperanza que muchos de Ustedes pueden hablar o encontrar una forma de superar esos obstáculos y trabajar juntos por un propósito común. Me gustaría ver a muchos de mis partidarios juntos en muestra de solidaridad. Si en verdad se sienten vientos de cambio, vamos a necesitarnos mutuamente para hacer cambios en muchas otras áreas. Para mi ha sido sobre nuestra cultura y nuestro derecho a ser quienes somos, pero sobre todo ha sido por nuestros hijos y por la generación que viene. Se suponía que NOSOTROS íbamos a dejar un mejor mundo para ellos, pero, ¿qué es lo que hemos conseguido?. Yo sé que de un modo u otro mi sacrificio no será en vano y que los años en los que he soportado la condena de esta soledad y sufrimiento en la prisión, harán un mundo mejor para esos niños y para las futuras generaciones. Eso y mi libertad son mi esperanza, pero no podré ser libre sin Ustedes. Así que tome unos minutos y edúquese en las injusticias de mi caso. Quizás lo impresione y lo enfurezca, pero Usted puede hacer algo sobre eso. Entonces, únase a nosotros.
En el Espíritu de Caballo Loco,
Leonard Peltier
Para más información:
Comité de Defensa/Ofensa de Leonard Peltier, LPD/OC
P. O. Box 7488
Fargo, ND 58106 – USA
Teléfono: (701) 235-2206
Escriba unas líneas al prisionero político:
Leonard Peltier# 89637
132U.S.P. Lewisburg,
P. O. Box 1000Lewisburg,
PA 17837, USA.
LEONARD PELTIER : Brutal agresión al preso político indio Leonard Peltier El preso político indígena Leonard Peltier ha pasado 33 años en prisión. Mientras espera una audiencia de libertad condicional, recibe una dura paliza en prisión, como denuncia su hermana. Lo que tratan es evitar su libertad.
http://www.lahaine.org/index.php?p=35650