COMUNICADO DE LA ASAMBLEA ANTIRREPRESIVA DE JAÉN
EN RELACIÓN AL PROCESO DE CRIMINALIZACIÓN
DEL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL JIENNENSE
Desde la Asamblea Antirrepresiva de Jaén queremos denunciar públicamente
la escalada represiva contra el movimiento estudiantil emprendida por la
Subdelegación del Gobierno de Jaén, con el Subdelegado Lillo a la cabeza, y
con la ayuda indispensable de la Comisaría de la Policía Nacional de nuestra
ciudad.
Ya son más de 20 los compañeros y compañeros sancionados. La cuantía de
las multas asciende a más de 5000 euros. Se ha multado a estos compañeros y compañeras por solidarizarse con el compañero detenido tras la manifestación del 9 de mayo en defensa de la educación pública. Algunos compañeros y compañeras han sido multados por recibir una tunda de palos por parte de la Policía Nacional y la Policía Municipal. Otros compañeros y compañeras han sido multados por pedir en la
puerta de la Comisaría que el compañero detenido no hiciera noche en la misma. Hay que recordar que las multas han recaído sobre personas que estuvieron durante todo ese día luchando por una educación pública, gratuita y de calidad, y en contra del sistema educativo que quieren imponer los que mandan, en el que solo van a poder estudiar los hijos y las hijas de los ricos.
Además, las multas se han enviado en pleno mes de agosto, con toda la mala
fe del mundo, pues se sabe que durante este mes, debido a las vacaciones, es
más difícil acceder a las asesorías jurídicas y es más difícil realizar una
denuncia pública del caso. Una mala fe que no nos sorprende en absoluto,
teniendo en cuenta la sarta de mentiras aireadas públicamente, sin ningún tipo
de escrúpulo ni de vergüenza ajena, por parte de la Comisaría de Jaén, que,
una vez más, ha querido hacer lo blanco negro, llamando “agresores” a los
agredidos y tildando de violentos a los cientos de estudiantes que se tiraron
ese día a la calle para defender un derecho básico: el del acceso universal a
una educación de calidad.
En el fondo, con estas multas se pretende criminalizar la protesta social y la
solidaridad más básica, algo que, hoy en día, no interesa al poder ni a sus
representantes políticos y policiales, que nos quieren sumisos y aborregados,
obedeciendo dócilmente mientras nos roban los derechos conquistados tras
años y años de lucha. Por otro lado, consideramos que todas estas sanciones
pretenden atemorizar a la juventud consciente y luchadora de nuestra ciudad.
Para colmo, quieren reducir este proceso a un problema de orden público,
cuando todas las sanciones obedecen a una decisión política más que
evidente: castigar a todo aquel que se opone al poder de los que mandan.
Además es denunciable que todas las sanciones se han impuesto con
identificaciones visuales y tirando de listas negras de las que la Policía se sirve
habitualmente, como se ha denunciado en otras provincias de Andalucía como
Sevilla1, Granada2 y Córdoba3. Este es un proceso habitual que hay que
denunciar públicamente, en todos sitios, pues en la práctica da cuenta de los
procedimientos que permiten al Estado operar impunemente a la hora de
reprimir la protesta social.
Justo por lo anterior, se comprende que de los cerca de 200 manifestantes que
pedían la salida del compañero detenido, se haya multado solo a una veintena
de manifestantes, que han sido elegidos para ser las cabezas de turco en este
proceso.
Por ello, desde la Asamblea Antirrepresiva de Jaén queremos manifestar
públicamente que los sancionados y sancionadas no están solos ni lo van a
estar; de hecho, cuentan con la solidaridad de toda la ciudadanía de bien que,
consciente de la injusticia flagrante que se está cometiendo en este caso, ya
está mostrando y mostrará su solidaridad y apoyo.
En ese sentido , pedimos a todos los movimientos sociales, a las gente humilde
y luchadora del pueblo de Jaén, que permanezcan atentos a las movilizaciones
que próximamente se convocarán por esta Asamblea para denunciar estos
hechos, apoyar a todos los compañeros y compañeras afectadas y gritar, alto y
claro, que luchar por los derechos de los de abajo no es ningún delito, y que
tenemos mucha más dignidad que aquellos que, amparados en un sillón o en
un uniforme, se creen los dueños del mundo, reprimiendo a los que luchan y
bailándole el agua a los mercaderes que nos quieren doblegados y con la
cabeza gacha.
Aquí, en Jaén, han dado con piedra.
¡Arriba l@s que luchan!